Los cuarzos están formados por silicio y nosotros también lo tenemos en una pequeña parte. Nuestra parte de silicio está sometida continuamente a variaciones energéticas por nuestro carácter y emociones. Sin embargo, el cuarzo se mantiene en un estado de equilibrio, por lo que son una ayuda eficaz para nosotros. Cuando nos encontremos en un nivel de desequilibrio, ya sea emocional, energético o físico, y no seamos capaces de volver al estado de equilibrio por nuestros propios medios, pongámonos en contacto con algún cuarzo y notaremos su efecto rápidamente, Pruébalo.
Verás que te ayuda a transmutar lo que no te sirve para así alcanzar el estado de equilibrio que necesitas.
El cuarzo, con su capacidad psicoelectrica, te transmite iones negativos benéficos que te ayudan a equilibrar las células de tu organismo. Aunque 1º nos limpia de impurezas y ondas negativas al alcanzar con su luz nuestra aura o campo sutil.
En nuestro cuerpo energético existen vórtices llamados Chackras. Estos vórtices energéticos transforman la energía en alimento para nuestro cuerpo físico. Son emisores y receptores de energía. Por eso, necesitamos que estén equilibrados y funcionen correctamente ya que si están bloqueados o demasiado acelerados, la conexión que tienen con nuestro cuerpo físico y emocional nos creará malestares no deseados.
El conocimiento de cada chackra nos ayudará a trabajar con el cuarzo de forma más rápida y eficaz.
También tener en cuenta los hemisferios izquierdo y derecho. Tanto de nuestra mente como de nuestro cuerpo.
El izquierdo corresponde al pasado y es la parte de nuestro cuerpo con la que recibimos (receptora).
El derecho corresponde al futuro y es la parte de nuestro cuerpo con la que damos.
Por esto, si necesitamos del cuarzo que nos absorba energía o negatividad, debemos ponerlo en la mano derecha o zona derecha del cuerpo. Y si necesitamos las cualidades del cuarzo, en la izquierda.
(esto último es válido para todos los minerales y no sólo para los cuarzos)
